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Leer más09-10-2024
La salud mental es un componente esencial del bienestar general que afecta cómo pensamos, sentimos y actuamos en nuestro día a día. No solo abarca la ausencia de trastornos, sino también la capacidad de afrontar las tensiones de la vida, trabajar de manera productiva y contribuir de forma activa a la comunidad.
El tener la oportunidad de hablar de la Salud Mental de manera abierta y sin tabués es un privilegio que antes no se tenía por los prejuicios sociales que acarreaba al hablar de salud y estabilidad mental.
Reflexionamos sobre la importancia de romper el estigma, crear entornos de apoyo y promover el cuidado integral de nuestra mente, reconociendo que la salud mental es fundamental para una vida plena y equilibrada.
“La salud mental es un derecho humano universal”
La fecha que se fijó para este importante tema es el 10 de octubre celebrandose el Día Mundial de la Salud Mental, una efeméride impulsada por la Federación Mundial para la Salud Mental (WFMH), con el apoyo de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En los países de ingresos bajos o medios, las personas con problemas de salud mental, neurológicos o con problemas de adicción están desatendidos y no reciben ningún tratamiento.
En contextos donde los recursos están mal distribuidos, las personas con menos recursos suelen tener dificultades para acceder a tratamientos, terapias y apoyo especializado. Esto genera un círculo vicioso, ya que el estrés financiero y la falta de atención agravan los problemas mentales existentes. A medida que los sistemas de salud enfrentan limitaciones presupuestarias, los más vulnerables son los primeros en quedar desatendidos, perpetuando la crisis de salud mental.
Este enfoque destaca cómo la salud mental no solo es un tema médico, sino también socioeconómico, subrayando la necesidad de políticas que enfrenten estas disparidades.
Muchas veces los problemas emocionales y psicológicos pasan desapercibidos o son minimizados debido al estigma social y la falta de información. Al hablar abiertamente sobre nuestras necesidades mentales, promovemos una mayor comprensión y empatía, y ayudamos a derribar barreras que impiden el acceso a la atención.
Visibilizar estos temas no solo nos permite buscar el apoyo adecuado, sino también crear entornos donde el bienestar mental sea una prioridad, tanto en nuestras relaciones personales como en los ámbitos laborales y comunitarios. Reconocer que la salud mental es tan importante como la física es un paso crucial hacia una sociedad más saludable y equitativa.