Una familia es mucho más que resolver las necesidades básicas...
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Por: Jennifer Meza
11- 04 – 2024
El llenar el cesto de la basura es tan fácil para un hogar, pues diariamente se generan residuos de diferente índole, desde residuos orgánicos, hasta residuos sólidos de todo tipo donde muchos de ellos son puestos en la basura sin el debido cuidado ya que unos representan un peligro inminente para las personas.
Es crucial tener en cuenta que lo que a menudo descartamos sin pensarlo dos veces, catalogado simplemente como “basura”, representa para muchos una vital oportunidad de subsistencia. Donde estos desechos no son el final de un ciclo, sino el comienzo de uno nuevo.
En los rellenos sanitarios, donde termina gran parte de nuestros residuos, se desarrolla una compleja economía informal que, aunque invisible para muchos, es fundamental para la supervivencia de numerosas familias. En estos espacios, hombres, mujeres e incluso niños dedican largas horas a la búsqueda meticulosa de materiales reciclables o vendibles entre montañas de desechos.
Esta labor, aunque peligrosa y a menudo pasado por alto, es esencial no sólo para su sustento económico, sino también para los procesos de reciclaje y gestión de residuos que benefician a la sociedad en su conjunto. Estas personas motivadas principalmente por la necesidad, transforman lo que muchos consideran inutilizable en recursos valiosos, contribuyendo significativamente a la reducción del impacto ambiental de los desechos. Sin embargo, su trabajo se desarrolla en condiciones de gran riesgo para su salud, sin acceso adecuado a protección o garantías laborales, donde los residuos sólidos representan el mayor peligro en la afectación de su salud.
Es por eso que el manejo de estos residuos tienen una estrecha relación con la salud de la población, donde se han presentado tres situaciones principales, la primera referente a la transmisión de enfermedades bacterianas y parasitarias tanto por agentes patógenos transferidos por los residuos como por vectores que se alimentan y reproducen en los residuos, por otra parte el riesgo de lesiones e infecciones ocasionados por los objetos punzo penetrantes que se encuentran en los residuos sólidos, esta condición pone en alto riesgo la salud de las personas que recuperan materiales en los vertederos; y por último la contaminación ocasionada por la quema de residuos, la cual afecta el sistema respiratorio de las personas que trabajan en estos rellenos sanitarios.
El impacto de los residuos sólidos en la salud de aquellos que trabajan en rellenos sanitarios es un tema de creciente preocupación a nivel global, particularmente en regiones donde la gestión y segregación de desechos no alcanzan estándares óptimos, como lo son los países Latinoamericanos y del Caribe. Las personas que se dedican a la recolección, separación y reciclaje de estos materiales se enfrentan diariamente a una serie de riesgos que pueden tener consecuencias significativas para su bienestar físico y mental.
Los rellenos sanitarios son depósitos finales de todo tipo de residuos, incluidos químicos tóxicos, materia orgánica en descomposición, metales pesados y partículas en suspensión que pueden afectar gravemente la salud. El contacto directo o la inhalación de estos compuestos incrementa el riesgo de desarrollar enfermedades respiratorias, infecciones cutáneas, problemas gastrointestinales y, en casos extremos, condiciones más graves como el cáncer.
Además, la manipulación manual de residuos sin la protección adecuada conlleva el riesgo de cortes, infecciones y otras lesiones físicas. Los trabajadores suelen carecer de equipo de protección personal, lo que los exponen a sufrir heridas causadas por objetos punzocortantes o materiales peligrosos inesperados entre los desechos.
De ahí la importancia de tener un buen manejo de nuestra basura y sobre todo de los residuos sólidos que se generan en nuestro hogar, con acciones tan sencillas como ubicar los vidrios de un vaso roto en una cajita de cartón, guardar las jeringuillas o catéteres en una botella, o rotular algún químico que ubicamos en la basura, podemos cuidar la salud de quienes hacen de nuestra basura su fuente de trabajo y sustento en sus hogares.
Lastimosamente en Latinoamérica estamos lejos en lograr una gestión eficaz de todos los residuos sólidos que se genera, pues la concientización que se recibe es casi inexistente y qué decir de la cultura de clasificación y reciclaje de basura que se traduzcan en resultados efectivos, de ahí la importancia de trabajar en iniciativas que ayuden a mitigar y sobre todo a reducir el número de personas que día a día se están enfermando por la mala gestión de los residuos sólidos que generamos en casa.
